Los procesos de tratamiento térmico requieren una atmósfera controlada con precisión para que el proceso tenga éxito. Estos procesosmetálicos se utilizan a menudo para fabricar piezas críticas en aleaciones especiales para industrias comola aeroespacial, automovilística, petroquímica ynuclear. Un control deficiente de la atmósfera del horno puede afectar a la calidad de las aleaciones, con consecuencias financieras y de seguridad.
¿Cómo garantizar un tratamiento térmico eficaz en atmósfera controlada?
Si no se controla la atmósfera del horno de tratamiento térmico, la aleación puede contaminarse. Esto puede provocar una pérdida de resistencia y ductilidad, así como un aumento de la fragilidad. La microestructura de la aleación también puede verse afectada, con la consiguiente pérdida de estabilidad dimensional y reducción de la vida útil. Además, las atmósferas incontroladas pueden provocar corrosión y otras formas de daños en la aleación.
En algunos casos, la contaminación puede incluso agrietar o romper la aleación.
Una atmósfera controlada es esencial para un tratamiento térmico eficaz.
Al evitar la contaminación, garantiza que la aleación tratada conserve sus propiedades. Esto es especialmente importante en las industrias deautomoción, química y energía nuclear, donde se dan las siguientes condiciones:
La ausencia de una atmósfera controlada puede provocar reacciones químicas en la superficie del conjunto metálico que se va a tratar térmicamente, comprometiendo su calidad y rendimiento y dando lugar a piezas rechazadas.
Tales condiciones provocan pérdidas económicas, pérdidas de tiempo y repercusiones potencialmente peligrosas para el cliente que utiliza la pieza sin detectar el punto débil. Además, una atmósfera mal controlada puede provocar daños en el horno o, peor aún, lesiones a los empleados.
Un horno de tratamiento térmico con atmósfera controlada proporciona un entorno óptimo para los componentes metálicos durante el proceso de tratamiento térmico.
Controlando cuidadosamente la composición y el caudal del gas del interior del horno, es posible conseguir un control preciso de la temperatura y una oxidación o descarburación mínimas.
El resultado es una mejora de la calidad y consistencia del producto, así como una mayor eficacia de la producción.
Para garantizar un tratamiento térmico eficaz en atmósfera controlada, es importante vigilar y controlar cuidadosamente los siguientes parámetros:
Controlando cuidadosamente estos parámetros, es posible conseguir un tratamiento térmico preciso en una atmósfera controlada, lo que se traduce en unamayor calidad y consistencia del producto.
Los gases inertes más utilizados en los procesos de tratamiento térmico son el argón (Ar), el helio (He) y el nitrógeno (N₂).
El grado en que una atmósfera puede calificarse de inerte depende de factores como el tipo de gas, su nivel de pureza, las temperaturas implicadas y el material tratado. Según el gas o la mezcla de gases utilizados, el proceso se dedicará a distintos tipos de tratamiento térmico: recocido, temple neutro, revenido, nitruración, sinterización o soldadura fuerte.
Los analizadores de gases de Fuji Electric se utilizan para controlar la atmósfera en todos estos procesos, con capacidad para medir con rapidez y precisión relaciones como Ar/He, Ar/N₂, He/N₂, H₂/Ar o H₂/N₂.
Este último es necesario para controlar una atmósfera rica en hidrógeno. Se utiliza para reducir el óxido de hierro a hierro y descarburar el acero. También contribuye eficazmente a la transferencia de calor y puede reaccionar con la presencia de oxígeno.
La solución de Fuji Electric para controlar el H₂/N₂ es un armario industrial compacto que incorpora:
Tomemos el siguiente ejemplo:
Dado que la conductividad térmica varía de un componente a otro, cualquier cambio en la concentración del componente que se está midiendo provoca una variación en la conductividad térmica del gas muestreado, que a su vez afecta a la temperatura del hilo de platino.
El analizador utiliza estas variaciones de temperatura para determinar el contenido de gas.
El gas del horno se extrae continuamente mediante una sonda de muestreo calentada y filtrada. A continuación, se conduce a través de un conducto de muestreo calentado hasta el armario compacto montado en la pared.
Integra el analizador de conductividad térmica TCD y todo el sistema de muestreo especialmente diseñado para garantizar la seguridad del analizador y garantizar una medición precisa, representativa y fiable de la concentración de H₂.
Descargue su hoja de aplicación y controle con precisión la atmósfera del horno durante el tratamiento térmico.