Regulador de temperatura PID - Serie PXF4
ref : PXF4En
303,00 € Solicitar un presupuestoEl uso de un controlador de temperatura permite a las industrias regular la temperatura de un horno, reactor, estufa, caldera o cualquier otro proceso de fabricación o máquina industrial.
La temperatura es un factor determinante en cualquier proceso de fabricación. El control de la temperatura ayuda a mejorar los procesos industriales y la calidad de los productos acabados. También ayuda a conseguir ahorros significativos. El control de la temperatura también es importante por razones de seguridad y para cumplir las normas medioambientales vigentes .
En este artículo se destacan todas las ventajas de que pueden disfrutar las empresas gracias al uso de termorreguladores.
En diversas industrias, el control de la temperatura es esencial para mantener la calidad del producto y reducir los defectos, así como los costes asociados.
Las temperaturas demasiado altas o demasiado bajas pueden afectar a la composición química de los productos y alterar su textura o aspecto. Es necesario realizar controles y ajustes periódicos para garantizar que la producción se mantiene dentro del intervalo de temperaturas requerido.
Por ejemplo, en la industria metalúrgica hace malabarismos constantemente entre temperaturas muy altas y muy bajas para producir una pieza metálica de una forma determinada con una resistencia determinada. Un fallo de temperatura puede hacer que el material reaccione de forma inesperada y quede inservible, porque ya no cumple los criterios de resistencia exigidos.
En la industria automovilística, los fabricantes de automóviles tienen normas muy estrictas en cuanto a la calidad de los materiales y la resistencia a los impactos. Los controladores de temperatura garantizan la calidad de los materiales de automoción probados en laboratorios de ensayo. Pueden conectarse a una interfaz hombre-máquina para registrar la temperatura y garantizar la trazabilidad de los productos acabados.
Es esencial minimizar los residuos de producción, que suponen una auténtica pérdida de ingresos para cualquier empresa. Controlar las temperaturas en todas las fases de la producción (almacenamiento de materias primas, producción y logística) puede evitar errores costosos.
Dado que la temperatura es uno de los factores que pueden provocar errores en el proceso de producción, es esencial prestarle especial atención para garantizar una calidad óptima del producto acabado.
Ya sea en la industria química, de incineración o del papel y el cartón, la temperatura es una medida que no debe pasarse por alto.
Cuando las reacciones se producen a temperaturas muy variables, pueden producirse daños materiales e incluso situaciones peligrosas. De hecho, la ausencia de un control adecuado de la temperatura se ha relacionado con una serie de incidentes catastróficos.
En la industria química, por ejemplo, una mala gestión de la temperatura puede provocar una reacción en cadena: incendios, explosiones, propagación de gases tóxicos, etcétera.
Estas catástrofes repercuten en la salud y la seguridad de los empleados y la población circundante. La reputación de la empresa también se ve afectada por este tipo de sucesos.
Para evitar este tipo de incidentes, es esencial que todas las industrias controlen y regulen constantemente la temperatura de sus instalaciones.
Para conseguirlo, las empresas pueden equiparse con un controlador de temperatura que les permita ajustar y controlar la temperatura en tiempo real. La nueva generación de controladores PID de la serie PXF de Fuji Electric, con su función PID autoajustable, garantiza una medición precisa de la temperatura en los procesos de producción y evita riesgos para la seguridad de bienes y personas.
Para evitar accidentes industriales, las empresas necesitan instrumentos de control de la temperatura industrial fiables y de alto rendimiento.
Mantener una temperatura constante garantiza que las máquinas funcionen con más eficacia y durante más tiempo.
Invertir en un controlador de temperatura industrial preciso y de alto rendimiento, como los controladores multilazo modulares de PUM, mejora el funcionamiento de las máquinas y las hace más eficientes.
Estos controladores modulares pueden conectarse a una interfaz hombre-máquina para facilitar y hacer más eficiente el uso de la máquina.
En los hornos de panadería, por ejemplo, los reguladores de temperaturamejoran el rendimiento y optimizan la producción de pan aumentando el tiempo de funcionamiento del horno.
El control preciso de la temperatura mejora el rendimiento de las máquinas en todo el entorno industrial.
Al evitar los rechazos de producción, recortar los costes de mantenimiento y reducir el gasto energético, los controladores de temperatura permiten a las empresas reducir costes.
La mayoría de los procesos de fabricación son sensibles a la temperatura. En otras palabras, la calidad general del producto acabado está muy influida por las fluctuaciones de temperatura durante la producción.
Para evitar costosos errores, muchas empresas invierten en controladores de temperatura PID. El uso de un controlador de temperatura PID permite mantener la temperatura de forma totalmente automática. Como resultado, la probabilidad de que se produzcan desechos debido a un error de temperatura en el proceso de fabricación es mínima. Puede evitar tener que volver a comprar materias primas, modificar el programa de producción, retirar lotes o interrumpir las líneas de producción.
En un proceso de fabricación industrial, las máquinas se ponen a prueba.
Las temperaturas demasiado altas o demasiado bajas pueden dañar los equipos industriales. Este desgaste puede acelerarse y agravarse si las variaciones de temperatura son bruscas y recurrentes. Las temperaturas demasiado altas o demasiado bajas pueden hacer que los equipos se desgasten más rápidamente o incluso se averíen.
Al evitar el desgaste de los equipos industriales debido a fuertes choques térmicos, los controladores de temperatura de Fuji Electric también limitan los costes de mantenimiento.
Las empresas buscan reducir costes y mejorar la rentabilidad. Utilizar equipos de control de temperatura duraderos y fiables es una forma eficaz de conseguirlo. No solo se evitan costes de mantenimiento excesivos, sino que también se alarga la vida útil de la maquinaria de producción.
Cuando se trata de reducir los costes energéticos, el control de la temperatura es una cuestión clave.
En una fábrica, la temperatura debe regularse a distintos niveles: la temperatura ambiente de los locales, la temperatura del proceso de fabricación y la temperatura de los equipos. A falta de un regulador de temperatura automático, la temperatura se gestiona manualmente. Esta gestión manual conlleva un consumo irregular de energía, que repercute directamente en la factura energética de la empresa.
Los reguladores de temperatura se utilizan para controlar ventiladores, bombas o válvulas de control mediante variadores de velocidad que ajustan su funcionamiento en función de las necesidades para evitar consumir demasiada energía.
Para los sistemas de calefacción de hornos, por ejemplo, el uso de un regulador de potencia por tiristores combinado con un regulador de alto rendimiento para controlar la resistencia de calefacción reducirá el consumo de energía de sus máquinas.
La realización de una auditoría energética permite determinar dónde se puede ahorrar energía e instalar sistemas de control para las aplicaciones que consumen más.
El uso de controladores de temperatura en sus plantas y maquinaria permite ahorrar a largo plazo.